jueves

Clamo hoy...

...

Rugen llantos y lamentos
por la alambrada mutilada
y relucen heridos corazones secos.
llenos de ayer, vacíos de mañana,
el rudo escalofrío de la alborada.
El horror del adios sin esperanza,
enfrentar el frio de las madrugadas,
esperando para el desayuno
de pan caliente una rebanada.

Hoy no es más
que un atisbo de mañana...

Las huellas del pasado añejo
marcan sin piedad las caras,
y surcan los vacíos ojos
como diablo con guadaña.
Yo, confiada, tomo tu mano,
quiero ver de la estrella su raya,
para pedirle que por piedad
resguarde nuestras tristes almas.

Porque hoy no es más
que un atisbo de mañana....

Valparaíso...



El nocturno vaho porteño
que empaña mentes claras
en cordura diurna;
trasposición neuronal
de la mano de la luna.

El cansancio de la escala larga,
de la empinada calle obligada;
abrir los ojos a lo real,
que no se va,
que sólo se cubre con el velo
encandilante del día,
de la rutina.

Espérame,
corramos y persigamos
el nocturno vaho porteño,
al encuentro,
con los perros callejeros.

Pestañeo macabro...

Abres los ojos
y el mundo ha cambiado...
ya no es el que era antes del pestañeo...

Los rios suben por la montaña,
y las pirámides cuelgan del cielo,
y los pétalos son de sal,
y las mariposas caminan con miedo.

La mano que cogias
cuelga fria e inmóvil,
y ese pelaje mullido y cálido
no es más que un abrigo de pobre.

Cuantificas tu palpitar,
y respiras lento,
... y los ojos que mirabas
ahora yacen muertos, frios, secos....

Friendship...



Por las anchas calles
nuestros pies son pequeños;
risas sin parar
pero con mucho seso.
Entre muchos porqués,
con algunos peros;
olvidadas canciones
adheridas al recuerdo...

Somos flores escarchadas
vagando en la noche solitaria
plagada de fantasmas
y de "Dias de Alejandra"...
Morboso código secreto,
compartido y eterno;
no te enojes por mis versos,
sólo son parte de este cuento...

Noche turbia


Recuerdos de una salida porteña...


Vomitando palabras,
estrujando el cerebro,
arrancando con perros
de la noche larga...

Cigarro mal prendido;
más carcajadas,
moco y sorbete...
es hora de ir a casa.......


Mala amnésica...

Mi mente está hecha lagrimas
y entre tanta salina humedad
mis pensamientos se disuelven
como una gota en el mar.
Intento recordar lo que pasó,
pero la sal llega a mi garganta
me hace carraspear,
y en eso me arrepiento,
y así, olvido.

El silencio me ha acompañado,
hace mucho que nos conocemos
el silencio me entiende,
me cubre con su manto de comprensión.
Me siento hija del silencio,
o su puta, su amante,
la que lo complace,
para luego reclamar el buen pago.

Pero soy mala...
Ni el silencio que me acuna
ni el mar que inunda mi cabeza
ni nada
puede borrar los hechos que quedaron esparcidos.
Soy mala, sólo eso recuerdo
no recuerdo por qué,
ellos sólo me enseñaron la culpa
no la razón.

Soy mala, y debiera morir por eso,
dicen algunos
pero sólo me daño a mi misma,
y con eso a algunos pocos más...

Concluyo: soy mala y debería morir...

pero quisiera morir recordando...

Robo

Estás lejos... es así sin remedio...
La lógica amorfa de la existencia nos separa, pero el retorno es siempre al origen, a aquel estado primigenio en que juntos, somos, en que el ahora del pasado se hace presente, y nos hace enmudecer y temblar. Ese ahora que llena mis soledades, en que tus manos, tus labios, tu piel, SON, acá, conmigo, y dejan de ser allá contigo... A cada momento pierdes una mano, los labios y tu piel, pero te los devuelvo, luego, con la distante caricia que los acompaña...
Soy una ladrona, y el recuerdo es mi cómplice...

Vómito mental... a modo de bienvenida....

He apilado tantos papeles que estaban sueltos, entre cuadernos y libros, medio corroídos, medio olvidados...
Y aquí están... que se hagan presentes y convivan en el ciberespacio con cuanta palabra güacha se encuentren, con ese ojo a medio lagrimear y a medio mirar, y con cuanta sesera ociosa que se tope con este rincón de infierno personal...